Gatlin rey de la velocidad
ATENAS, 22 de agosto (AFP) - El estadounidense Justin Gatlin, un semidesconocido que fue segundo en las selecciones norteamericanas, ganó este domingo en Atenas la prueba reina del atletismo y de los Juegos Olímpicos, los 100 metros planos, superando a todos los favoritos.
Gatlin, cuyo único logro hasta ahora fue el título mundial en sala de 60 metros en 2003, ganó con un buen registro de 9.85, su mejor marca personal, superando por una centésima a otro inesperado medallista de plata, el portugués de origen nigeriano Francis Obikwelu (9.86).
En un final apretado en que los tres primeros entraron en una diferencia de dos centésimas, el estadounidense
Maurice Green, campeón olímpico en Sydney, se llevó el bronce con 9.87.
Gatlin piensa que con su triunfo comienza una nueva época. "Maurice Greene es uno de los más grandes competidores en el mundo. Sin embargo, ha empezado una nueva era. Los jóvenes están pidiendo paso", dijo el nuevo campeón olímpico, nacido en Brooklyn (Nueva York) hace 22 años.
Obikwelu, primer europeo en acceder al podio desde la victoria del británico Linford Christie en Barcelona (1992), mejoró en una centésima el récord de Europa que compartía con Christie y su compatriota Dwain Chambers.
La jornada fue buena para el atletismo sueco, que sumó este domingo dos nuevas medallas de oro, con Christian Olsson en triple salto, y Stefan Holm en salto en alto, que se suman al logrado la jornada anterior por su compatriota Carolina Kluft en heptatlón.
Por su parte, la japonesa Mizuki Niguchi se coronó campeona olímpica de maratón en Atenas, delante de la keniana Catherine Ndereba, en una inversión de las posiciones con respecto al Mundial de París en 2003, en una dura carrera en que la británica Paula Radcliffe abandonó.
El último título de la jornada fue para el húngaro Adrian Annus en martillo, con un lanzamiento de 83,19 m.
Pero en estos Juegos de Atenas, y sobre todo en atletismo, el protagonismo sigue siendo del dopaje y la rusa Irina
Korzhanenko, que ganó el 18 de agosto en Olimpia la prueba de lanzamiento de bala para mujeres, dio un resultado positivo al control antidopaje a un esteroide anabolizante, el estanozolol.
Gatlin, cuyo único logro hasta ahora fue el título mundial en sala de 60 metros en 2003, ganó con un buen registro de 9.85, su mejor marca personal, superando por una centésima a otro inesperado medallista de plata, el portugués de origen nigeriano Francis Obikwelu (9.86).
En un final apretado en que los tres primeros entraron en una diferencia de dos centésimas, el estadounidense
Maurice Green, campeón olímpico en Sydney, se llevó el bronce con 9.87.
Gatlin piensa que con su triunfo comienza una nueva época. "Maurice Greene es uno de los más grandes competidores en el mundo. Sin embargo, ha empezado una nueva era. Los jóvenes están pidiendo paso", dijo el nuevo campeón olímpico, nacido en Brooklyn (Nueva York) hace 22 años.
Obikwelu, primer europeo en acceder al podio desde la victoria del británico Linford Christie en Barcelona (1992), mejoró en una centésima el récord de Europa que compartía con Christie y su compatriota Dwain Chambers.
La jornada fue buena para el atletismo sueco, que sumó este domingo dos nuevas medallas de oro, con Christian Olsson en triple salto, y Stefan Holm en salto en alto, que se suman al logrado la jornada anterior por su compatriota Carolina Kluft en heptatlón.
Por su parte, la japonesa Mizuki Niguchi se coronó campeona olímpica de maratón en Atenas, delante de la keniana Catherine Ndereba, en una inversión de las posiciones con respecto al Mundial de París en 2003, en una dura carrera en que la británica Paula Radcliffe abandonó.
El último título de la jornada fue para el húngaro Adrian Annus en martillo, con un lanzamiento de 83,19 m.
Pero en estos Juegos de Atenas, y sobre todo en atletismo, el protagonismo sigue siendo del dopaje y la rusa Irina
Korzhanenko, que ganó el 18 de agosto en Olimpia la prueba de lanzamiento de bala para mujeres, dio un resultado positivo al control antidopaje a un esteroide anabolizante, el estanozolol.
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